Spiga

Tour Pisagua 2003 (2a. Parte)

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Día 0: Sábado decisivo.


15:00 Hrs. Reunión en la sede para el pago de inscripción de los que no se hubiesen puesto todavía. También hubo una discusión matemática de alto vuelo que necesitó el apoyo de ecuaciones diferenciales y funciones derivadas de tercer grado para determinar la cantidad de carne y cerveza necesaria para sostener al grupo durante la estadía en Pisagua.


17:00 Hrs. Fuga al supermercado para poner en práctica las teorías matemáticas que se habían aventurado, aunque primero nos aseguramos con la compra de 12 Kg. de carne, 2 pollos enteros y 2 bolsas de chorizo (de ave, que tiene menos colesterol y es más barato, por supuesto) en la carnicería del Mall, para que la expedición no pareciera tomatera. Luego nos fuimos al Líder por el resto. Golpeadito contó con el apoyo incondicional de Master, Pelao y el Suegro, duchos en este tipo de menesteres y con un amplio bagaje carretero por los senderos polvorientos del Lado Oscuro.


18:00 Hrs. Nuevo conciábulo para hacer algunos ajustes urgentes en las ecuaciones por falta de fondos para avalar todo lo que cargamos en el carrito. Por decisión unánime, se devolvieron todas las leches (descremadas) que había echado Golpeadito, 4 jugos, 3 coca-colas, 1 frasco de sal y 1 bolsa de carbón, que supuestamente estaban sobrando (En beneficio del grupo encargado de las adquisiciones y para mi tranquilidad de conciencia, debo aclarar que el algoritmo aplicado en este ajuste no consideró en ningún momento ni las cervezas ni el vino, por ser considerados elementos indispensables en la dieta de los parapentistas. Estos parapentistas).


21:00 Hrs. Reunión en la sede para estibar la carga en los vehículos y distribuir a los pasajeros del grupo de avanzada (compuesto por el 84.62% del total de participantes inscritos) que iba a establecer el campamento base. Como de costumbre, algunos llegaron a las 21.30, otros un poco más tarde. Faltaba ir a buscar el motor, echar combustible, comprar cigarros, más cervezas por si acaso y varios etcétras más que nos llevaron a un alargue un poco más largo de lo normal para el común de los mortales, excepto para los que conocen bien al Master de la Eternidad de los Pies Descalzos, también conocido como Pata’e Cuete, Kual-Chang Caine y/o Kung-Fú.






23:15 Hrs. Salida del furgón, tándem octoplaza, discotheque, salón bar, dormitorio, bodega y unidad de almacenamiento multipropósito de la ciudad de Iquique, para encontrarse con el vehículo Nº 1 a cargo de Golpeadito que ya estaba impacientándose a un costado de la carretera frente a la Copec de Alto Hospicio y que contaba con la compañia de Tsunami+, esto es; Repollo, Llavero, Gringa1 y Gringa2. Las gringas fueron bautizadas como Erika Eleniak y Kim Bassinger en el acto, quiero decir en el momento, o mejor dicho, allí mismo. Y se prohibió al resto del grupo, especialmente a los del furgón, donde iban Pepe, Master, Pelao, Cano y el Suegro volver a mencionar el tema de las cholgas importadas..


23:30 Hrs. Primer desagüe al costado de la carretera mientras esperábamos que La Tia, que vive en Alto Hospicio y que confirmó su asistencia a última hora, se uniera al grupo, lo que hizo que algunos se empezaran a cagar de frío antes de lo normal, a pesar de las cervezas y el vinito tinto que ya había sido requerido por sus propiedades caloríficas (sic).


24:00 Hrs. Posiblemente a esta hora partimos definitivamente con rumbo a nuestro destino definitivo, Pis-Agua (en los recovecos de mi retorcido cerebro me empezaba a imaginar una letrina precolombina enorme al lado del mar). Más cervezas para todos, menos para el chofer, algunas fotos, más cervezas, otra parada para mear, más fotos, caras pálidas (la Tía cagada de la risa y muy abochornada se negó rotundamente a participar), fotos y el Master que no le encontraba el botón a la cámara, tiritones, vuelta al furgón, frío, mucho frío y Pelao que menciona el ron que llevaba como carta bajo la manga. La Tía demostró que se había incorporado al team del furgón porque no tiene un pelo de tonta, y saltó como resorte diciendo: “yo tengo unos vasitos”. El Suegro hizo un par de contorsiones cuasi acrobáticas para recuperar una coca-cola de entre todos los bultos, Master se puso con el hielo y Cano hacía las mezclas, mientras Pelao se disfrazaba de pulpo sujetando lo que le pasaran. El único que no participó fue el Pepe que tenía las dos manos ocupadas con el volante del furgón, pero que apoyaba la causa con todo su corazón. Definitivamente un grupo altamente cohesionado, organizado y con una meta común. Huelga decir que la botella milagrosa se acabó antes de llegar a nuestro destino.




01:45 Hrs. Hora estimada de arribo a Pisa-Guaa (¿Se imaginan un motel de 5 estrellas montado en palafitos sobre la más maravillosa de las playas?) Porque a esa hora el cronista iba absolutamente extraviado y alucinando, después de la cerveza y el ron, otra meadita, y posiblemente porque se había comido nada más que un pan con mantequilla como desayuno-almuerzo-cena por allá como a las 11 de la mañana. Aunque su antena parabólica no dejó de funcionar nunca y su disco duro lo grababa todo, clasificando y archivando cahüines en forma subconciente, su precaria condición le impidió percatarse del momento en que la Tía sacó unos panes con queso crema que hicieron maravillas por la estabilidad intestinal de algunos, especialmente del Dúo Dinámico apenas llegaron al pueblito de Pizza-Ya ¿Alguien tiene hambre?


A propósito de este par sin par. Nunca en mi vida, he visto a un par de pendejos más motivados que el Pelao y el Canito cuando se trata de hacer cagadas, una de las simbiosis más sorprendentes que se puedan encontrar en la naturaleza y que se puede resumir muy asertivamente como la Cano-dependencia del Pelao y la Pelao-dependencia del Cano o viceversa. No llevábamos ni 15 minutos allí cuando organizaron la primera fogata. 30 minutos más tarde, Golpeadito tenía serios problemas para evitar que el parcito desarmara una cabaña de madera (desocupada y que estaba peligrosamente cerca) para alimentar la escuálida fogata. Al final los pendejos atinaron y mientras uno le metía conversa a Golpeadito, el otro sacaba una tabla de la cabaña, luego se rotaban y el otro le metía conversa. El abastecimiento de vino sufrió una pérdida importante esa noche, mientras un par de botellones de 1.5 Lts. se paseaban alrededor de la fogata. En la mañana se pudo apreciar claramente la cantidad de tablas que le faltaban a la cabaña, que tenía sus paredes rayadas con mensajes del tipo “NO SACAR MADERA” en varios tamaños y tipografías, escritos precariamente con plumón negro y que, lamentablemente, eran imposibles de leer durante la noche.


XX Hrs. Se empezaron a desmayar de fatiga los integrantes del grupo, el Suegro entre los primeros haciendo la maniobra SAT adentro de la carpa, parece, porque todo le daba vueltas vertiginosamente. Golpeadito por más que charrasqueaba en inglich, no tuvo eco y después de transpirar copiosamente para armar la carpa, acomodar un par de sacos e incluso almohadas, velas aromáticas, música ambiental y jacuzzi, se tuvo que resignar a dormir solo, porque las gringas se asustaron con el olor a copete que le brotaba por todos los poros, el tamaño de sus dientes o presintieron que se iba a mear en la cama y a vomitar la carpa.


A la Tía se le ocurrió ir a meterse entre los Pendejos Dinámicos Simbióticos y el Suegro. Al otro día reclamo de todo, que el par de pendejos huevones metieron caleta de bulla para meterse a la carpa en la noche, que los pedos del Canito eran lo peor de lo peor, porque los pendejos se ventearon adentro, que la despertaron, que se cagó de frío en un rato por más que el Suegro trataba de abrigarla con sus pulposas manos y encima que el huevón.... ¡roncaba!. En la mañana cuando despertó e hizo reconocimiento de terreno, de carpa y cuerpo para comprobar si aún estaba virgen, contó a los sobrevivientes y le faltaba uno... Al final y después de poner un poco más de atención... ¡Encontró a Pelao debajo del Cano!!!... Cosas de pendejos ¿no?.


Continuar...