Spiga

Hombres de Barro


Al pensar en el origen de los “Hombres de Barro”, no puedo parar por alto algunos hitos importantes de mi propia vida, muchos rostros con nombres amigos y más de algún rostro amigo cuyo nombre he perdido en una nebulosa de recuerdos. Creo que fue cuando comencé a ordenar y agrupar mis poemas y canciones que estaban desperdigados en una suerte de archivo artesanal compuesto por hojas sueltas del mas variado tipo, libretas, agendas, cuadernos y cassettes (tuve la suerte de rescatar algunas canciones de entre mi desorden neuronal), pero ya había perdido buena parte de mi producción cuando decidí ponerle fin al caos.

De esta tarea tediosa y bastante dificultosa, surgieron varios nombres que me permitieron agrupar principalmente mis canciones, ya fuera por su contenido, género o la etapa de mi vida en que fueron escritas;

Ahora me he propuesto otra tarea bastante tediosa, se trata de pasar a Mp3 el resto de mi producción y en la medida de lo posible iré agregando los links a las colecciones. Por el momento estarán sólo los títulos.

Algo más que un Montón de Carne y Huesos”, “De la Vida y la Verdad”, “Sueños Profanos”, “Primavera” y “Flores, Colores y Amores” son los nombres de mis colecciones de canciones, vivencias y sueños (más de cincuenta canciones, malas y buenas, muchas todavía andan buscando el lugar preciso para vivir).

De éste ejercicio mental surgieron varios otros nombres, que aunque no me sirvieran para el propósito inmediato, encerraban conceptos tan amplios y poderosos que se grabaron en mi memoria para desarrollarlos más adelante (varios de ellos son aporte original o desarrollo de ideas originales de mi álter ego, amigo y hermano “Cuto”); “Joyas de Sal”, “Hidroglifos”, “Aeroglifos”, “Mitos y Leyendas”, “Frágil” y “Ritmo Interior” entre otros.

En ese mismo tiempo, con el “Chino” Torrejón (ex Alfamérica) que nació con un charango debajo del brazo, ya estabamos haciendo la música que llevábamos adentro y que peleaba una dura batalla para madurar y florecer, faltaba lo más difícil; el nombre del grupo. Fueron largas sesiones (algunas mas regadas que otras) donde dejábamos volar la imaginación por pasajes tan recónditos de nuestra psiquis que normalmente terminábamos, cansados de reírnos, mas confundidos que al principio. De estas maratónicas degustaciones cerveceras, carnívoras y vitivinícolas reapareció el nombre “Mitos y Leyendas” que sonaba bien, pero no reflejaba cabalmente lo que pretendíamos ser como grupo, seguimos buscando un nombre y “Mitos y Leyendas” volvía recurrentemente, hasta que nos cansamos y decidimos esperar a que el nombre llegara solo. Ni siquiera los temas tenían un nombre concreto, nos referíamos a ellos como “el tema del charango”, “la marcha”, “el barroco” o el “vals”. Creo que el único que nació con nombre fue “Humberstone”, una suerte de Foxtrot que es como para tocarlo con una peineta envuelta en papel.

Estoy casi seguro de que fue en alguna de estas sesiones cuando conversamos sobre la idea de realizar un concierto en Santa Laura (tipo Pink Floyd andino, antes de que siquiera soñaran con traer al “Quila” al mismo lugar), con luces, efectos, imágenes de video y diaporamas como apoyo para la presentación, en esos días estábamos estrenando la televisión por cable y tuve (tuvimos porque el “Torreja” también quedó loco) la fortuna de ver el Circo de Soleil y su famoso espectáculo “Saltimbanqui”, que incluía una serie de números de acrobacia, mímica, payasos, gimnasia, etc. Donde la música y la iluminación jugaban un papel preponderante, al mismo tiempo que los vestuarios, y la dramatización de escenas relacionadas con un personaje principal; el “Saltimbanqui”.

El “Torreja” me llamó por teléfono (siempre me llama cuando ve algo interesante en la tele) y me urgió a poner el HBO, lo que no era necesario porque hace rato estaba pegado en la pantalla. Conversamos mas tarde sobre hacer algo parecido (una obra con una idea central o el desarrollo de un tema) y no llegamos a ninguna parte, pero la semilla ya estaba plantada y “Mitos y Leyendas” comenzó a vivir dentro de nuestras mentes, y mientras se consolidaban sus raíces, sus primeros brotes sonaban con una tema para charango y guitarra que nació, varios años antes, cuando le mostré mi canción “De la Vida y la Verdad” al “Chino” y le gustó un acorde, en ese tiempo tocábamos con el Alex Alcaíno, que nos leyó la mente cuando tocó una melodía en la flauta de pan, Este tema nos estuvo rebotando en las cabezas durante años, esperando su momento, tal como hacen las semillas en el desierto de Atacama.

Luego vinieron otros músicos, algunos hicieron su aporte y otros pasaron sin pena ni gloria, sin entender cabalmente la idea que teníamos (a nosotros nos costaba entendernos), afortunadamente estaba el “Cuto” que lograba traducir a palabras nuestras ideas. Recuerdo al “Pato” Antezana en nuestros inicios, cuando trataba de aprender a tocar el saxo y lo hacía rebuznar de lo lindo, al “Conoto” (otro ex Alfamérica) y su pasión por el bossa y todo lo que sonara brasileño, con una vida dedicada a la música y al “carrete”. Algunos vinieron un día y no volvieron nunca más, el Jhonny Pérez, un negro gordo que se llevó la flauta de pan del “Chino” a Arica y allá se lleno de polillas. Me acuerdo del “Cachomba” (músico excepcional pero con una vida demasiado complicada), del “Pat’e Burro” con su vozarrón privilegiado y su habilidad para tocar la guitarra con la mano izquierda y hacer los acordes con la derecha (sin invertir las cuerdas por supuesto). Mas tarde vendría el “Pelao” Gordillo (otro ex Alfamérica y todavía fiel a la causa) que toca lo que le pasen y si no puede, lo intenta por lo menos, el “Profe” Nelson Monje que trataba de imponer orden a una manga de desordenados agradecidos de la vida, pero que necesitaba el aplauso como aliciente para seguir y lo buscó en el seno de otras agrupaciones. Echo de menos al Nelson Thon con su ceño fruncido y su amor por la música, un genio de verdad (que desperdicio de talento se vuelve tu vida allá lejos en Pozo Almonte), me acuerdo del “Negro Tito” que al final “no pudo” seguir con nosotros, dedicado de lleno a su trabajo y su familia no le quedaba tiempo para la diversión musical. Siempre bromeábamos con eso de que “el negro no puede” y al final resultó ser cierto.

Mas tarde la pausa y la problemática. El “Chino” que se fue a trabajar a Colchane en la cordillera y mas tarde a la mina un poquito mas abajo no mas, los dramas del “Negro”, las necesidades de aplauso y reconocimiento del Nelson grande, los problemas económicos del Nelson chico y sus conflictos espirituales, “Conoto” que decidió estudiar en serio y yo que perdía el interés por el grupo, quise volver a mis canciones, mis poemas. Intimé mas con el “Cuto” intercambiamos algunas ideas, me ayudó en alguna canción, le puse música a alguna letra suya pero estabamos lisiados de la voz. Hicimos un esfuerzo con el Thon pero seguíamos lisiados. En esos tiempos debo haber escrito la serie de poemas que sirven de base a “Hijos del Sol” de un proyecto bastante más ambicioso llamado "Mitos y Leyendas". Luego el silencio.

El día menos pensado llega “Conoto” diciendo que tiene una movida para tocar en el Cabildo Cultural (el año anterior había participado en la organización del primero), armamos un tema jazzero de él y uno mío. Junto a nosotros estaban el “Totó” (que en ese tiempo todavía tocaba la guitarra con algo de temor, pero con una habilidad innata), el Mauricio (“Guairovic” para los amigos) que tocaba teclados pero nunca lo vi muy convencido (tal vez su onda era otra), el “Conoto” tocando bajo y yo ¡una guitarra eléctrica!. Con el “Chino” tocando charango en “Play-back” de una grabación que habíamos hecho quien sabe cuando, y otro compadre leyendo algunos de los poemas que yo tenía para Mitos y Leyendas; el “tema del charango” sonó un cañón. Luego “Conoto” y “Totó” volvieron a lo de ellos, en Santiago y Valparaíso.

Mas silencio ...y un día viene el Monje a contarme que se había salido del “Llaima” ¿..?, y que había conocido a dos músicos estupendos, allí conocí a otro Mauricio, un sobrino del Andrés Márquez (que lamentablemente esta marcado genéticamente como Illapu; papiche y con el mismo timbre de voz) tocaba muy bien el bajo y era estupendo percusionista, a un gordo simpático cuyo nombre no recuerdo porque parece que también se llamaba Mauricio, y que tocaba la quena y zampoñas (pero le faltaba experiencia arriba en el escenario), al “Pacha” que no tuve la oportunidad de conocerlo mejor pero que tocaba bastante bien las cuerdas; bajo, guitarra, charango, lo que le pasaran; una botella, un serrucho, a ella, que se yo.

Definitivamente no estábamos preparados cuando subimos al escenario del Municipal, algunos lo sabíamos pero las cartas estaban echadas y había que tomar decisiones. Decidimos disolver el grupo después de una presentación que para algunos no estuvo mal, pero para los más perfeccionistas fue un total fiasco. Quedamos como amigos y con ganas de hacer algo mas (pero en serio), yo no tenía muchas ganas de hacer cover (como le dicen ahora a tocar temas de otros), el resto quería seguir tocando, pero yo necesitaba ordenar mis ideas y hacer lo que realmente quería hacer, sin importar el tiempo que me llevara para hacerlo.

Un día me encontré muerto de aburrido “matando” canales con el control remoto, cuando volví a ver parte del “Saltimbanqui”, esta vez en el People & Arts en un reportaje que incluía gran parte de la historia del Circo del Sol y me di cuenta de que estaba perdiendo mi tiempo, me encerré en mi pieza durante algunos fines de semana mascullando los poemas de Mitos y Leyendas, algunos ritmos compuestos que me ayudó a comprender mejor el Thon y nacieron varios temas, de los cuales seleccioné cuatro para terminar de una vez por todas con esa especie de obsesión que no me dejaba tranquilo, con el “Chino” decidimos grabar un “demo” contra viento y marea, empezamos los dos tocando lo que podíamos, el resto lo tocaba un programa de computador gracias a esa maravilla de la tecnología que es el “Midi”. Cuando nos faltaron los pulmones llamámos al “Pelao” que estaba “siempre listo”, y empezamos una especie de búsqueda de almas gemelas para preparar una presentación en vivo y para terminar de grabar lo que faltara.

Le mostramos un par de temas al “Polo”, le encantó la idea, estuvo muy interesado, pero después de conversar un par de veces no enganchó con el concepto global o tenía miedo de cortar sus “Raíces”, se mencionaron nombres como el “Pollo” y el “Pollo Chico”, que tocaban con el “Polo” pero no aparecieron nunca. Mas tarde el “Chino” se encontró con el Nelson Rodriguez, le mostramos un “demo” a su grupo “Arenal” o “Voces del Arenal”, estuvimos en uno de sus ensayos y escuchamos algunos arreglos para voces que me dieron envidia. Nuestra música sonaba bastante sintética por efecto del computador y el sintetizador, lo que les debe haber sonado como música para Video Juegos (no escucharon lo mismo que escuchábamos nosotros), les pasamos la partitura de “Danza Ancestral”, pero nunca supe en que acabó eso, y así estábamos, con la música casi lista, grabamos un poco mas nosotros mismos, creamos melodías nuevas sobre lo que ya teníamos y seguimos grabando, lento pero seguro.Llegó Navidad y no se me ocurrió nada mejor que hacer una carátula, grabar lo poco que teníamos de “Mitos y Leyendas” en CD (con un montón de secuencias MIDI) y regalárselo a mis buenos amigos, al otro día, todos me llamaron más contentos que el día que recibieron su primer instrumento musical, para agradecerme el gesto y nos llenamos de esa energía que es vital para seguir luchando por una causa.

Increíblemente, al ordenar los nombres de los temas, todavía no estaba claro el nombre del grupo, así que le puse “Mitos y Leyendas” mientras tanto y el trabajo se llamaba “Hombres de Barro” al igual que uno de los temas, relacionado con el Génesis desde el punto de vista de las creencias Andinas. Más tarde decidimos que los nombres estaban invertidos y pasamos a llamarnos “Hombres de Barro”. Con el CD en la mano, el “Chino” salió a desquitarse de los que no creyeron o no entendieron la idea, y tuvo la oportunidad de demostrar lo que se puede lograr cuando hay un poco de materia prima, sin importar que los recursos no sean los más adecuados. Se encontró con el “Juanito” Flores, conversamos, le gustó la idea, nos juntamos en otra oportunidad a escuchar la música y quedó mas convencido, el problema es que “Juanito” vive de la música, no pasaba por un buen momento y para rematar nuestros horarios no compatibilizaban para nada.

El “Chino” siguió su búsqueda y por allí se encontró con el Hugo Reyes, le hizo escuchar el CD, no le quería creer que lo habíamos grabado en una pieza sin la menor acústica y usando un solo micrófono, pero a diferencia de muchos, Hugo si que entendió la idea y quiso ser parte de ella, como el “Juanito” no llegó y nos entró cierta prisa, fue mas que bienvenido, más tarde, él mismo se ocupó de convencer al Norman y al Freddy (nos estábamos convirtiendo en “Llaima”). Al final, el único que prendió fue el Norman, el guatón Hugo estaba muy complicado con su pega, el Freddy con sus estudios y el proyecto aún requería mucho trabajo y un gran esfuerzo. Se nos quedaron en el camino, para otra vez será, nos queda mucha música y muchas ideas inconclusas por delante.

Y ahora, cuando ya conseguimos lo que queríamos, no estamos totalmente satisfechos, tal vez nunca vamos a estarlo y esa sea nuestra motivación. Lo que nos deja tranquilos es el sonido, ese sonido es nuestro, es de los Hombres de Barro. Sabemos que va a cambiar cuando vengan otros aportes individuales, pero estamos tranquilos porque es así como debe ser, los individuos deben ser un aporte que enriquezca el contenido de nuestro mensaje musical. Lo mejor de todo es que ya tenemos listo el material para nuestro segundo trabajo, que también tiene una idea central que enlaza los temas musicales y la temática del contenido, pero eso es una sorpresa.

Para muchos puristas, tal vez la música que hacemos no sea folclórica, para otros tal vez sea demasiado simple, mas de alguno dirá que algunos sonidos no suenan bien armónicamente, que el ritmo no es el correcto, etc. Pero lo único que realmente importa al final, es que exista alguien, una persona, a quien se le paren los pelos de la nuca y se le ponga la piel de gallina cuando escuche “Tierra, Diluvio y Amanecer”, eso será alimento suficiente para que nuestros espíritus puedan seguir viviendo esta búsqueda interminable de nuevas formas de expresar lo que llevamos dentro, tratando de encontrar la manera de hacer sentir a alguien mas, lo que sentimos o como nos sentimos en algún momento de nuestras vidas.


Que difícil es sacarle una foto
a la soledad desnuda,
a la esperanza en harapos
y a dolores de cabeza.


A la libertad encarcelada
con llave en nuestra mente
y a toda la alegría y el llanto
que llevamos dentro.


Iquique, Enero del 2000.


4 comments:

LOS CHANGOS DE ALTO HOSPICIO

20 de abril de 2008, 1:34 a. m.

se te olvido mensionar que querias mostrar siertos temas del disco hombre de barrro y que me tubieron como un mes sacando en el violin ese sanjuanito que de hecho nunca se me a olvidado..ajkajakjaka oye quiero sabes como puedo ubicar al chino tengo un proyecto propio llamdo los changos me gustaria estamos armando algunos temas y en eso estoy

Ronald Moreno C.

21 de abril de 2008, 12:39 p. m.

Miguel!

Sorry compadre, a tí y al Marino chico, un lapsus mentalis atribuible a la edad... jeje
Supongo que ya le estás sacando chispas a ese violín. Me gustaría saber más de tu proyecto y escuchar algo si se puede.
El chino está completamente abocado a fabricar plata para pagar sus nuevos vicios; la casa, el auto, las colegiaturas, algo pa echarle al buche, etc. Nos hemos visto muy poco ultimamente, a veces pareciera que me está evitando, pero debe ser por culpa de la pega y sus malditos turnos de 4x4
En cuanto lo vea, le paso la voz. Ya sabes como ubicarme.

Saludos,

LOS CHANGOS DE ALTO HOSPICIO

10 de mayo de 2008, 2:46 a. m.

que buenbo que me ayas contestado..pero el vieolin esta biem ..solo estandar..los changos estan creando ahora ..he hablado con mucha gente de ese trabajo de hombres de barro que no se concreto con los changos..pero me gustaria ahora hacer pariticipe de nuetro sueño
me gustaria que le hecharas una mirada alos temas ..el kuto me ayudo con dos de ellos..
pero ultimamente no lo he visto ..mandame tu correo ..vale y hablamos mas largo

miguel meneses
dir de los changos

LOS CHANGOS DE ALTO HOSPICIO

10 de mayo de 2008, 2:47 a. m.

aqui hay un adelanto...

www.changos.es.tl